martes, 28 de mayo de 2013


Oraciones interrogativas:

Numancia:


Numancia es el nombre de una desaparecida población celtíbera situada sobre el Cerro de la Muela, en Garray, a 7 km. al norte de la actual ciudad de Soria, España. Desde tiempo inmemorial, dicho cerro era propiedad de la familia Marichalar. Luis de Marichalar, Vizconde de Eza (abuelo de Álvaro de Marichalar) lo donó al Estado en 1917.
En el año 153 a. C. tiene el primer conflicto grave con Roma, al dejar entrar en la ciudad a unos fugitivos de la tribu de los bellos, procedentes de la ciudad de Segeda (actualmente sus restos están situados entre Mara y Belmonte de Gracián en Zaragoza). Los numantinos, al mando de Caro de Segeda, consiguen derrotar a un ejército de 30.000 hombres mandados por el cónsul Quinto Fulvio Nobilior, pero hubo que lamentar que su jefe, Caro, muriera en la batalla.
Tras veinte años repeliendo los continuos e insistentes ataques romanos, en el año 133 a. C., el senado romano confiere a Publio Cornelio Escipión Emiliano El Africano Menor la labor de destruir Numancia, a la que finalmente pone sitio, levantando un cerco de 9 km. apoyado por torres, fosos, empalizadas, etc. Tras 13 meses de hambrunas, enfermedades y tras agotarse sus víveres, los numantinos deciden poner fin a su situación. Algunos de ellos se entregan en condición de esclavos al ejército de Publio Cornelio Escipión Emiliano, mientras que la gran mayoría de los numantinos decidieron suicidarse, prevaleciendo su condición de libertad frente a la esclavitud de Roma.

miércoles, 22 de mayo de 2013


Valores de quod:

Teatro de Mérida:

El Teatro romano de Mérida es una construcción promovida por el cónsul Marco Vipsanio Agripa, en la ciudad romana de Augusta Emerita, actual Mérida, España. Según fecha inscrita en el propio teatro su construcción se produjo en los años 16 a 15 a. C.
El teatro ha sufrido varias remodelaciones, la más importante, a finales del siglo I o principios del siglo II, posiblemente en época del emperador Trajano, cuando se levantó la actual fachada o frente de escena, y otra en época de Constantino entre los años 330 y 340, introduciéndose nuevos elementos arquitectónicos-decorativos y construyéndose una calzada que rodea el monumento. Tras el abandono propiciado por el cristianismo a causa de la inmoralidad del teatro, éste se abandona y cubre de tierra, quedando solamente visible la zona superior del graderío (summa cavea). La imaginación popular la denominó "Las Siete Sillas", donde según la tradición se sentaron en ella diversos reyes moros para decidir los destinos de la ciudad. Es además desde 2007, uno de los 12 Tesoros de España

martes, 21 de mayo de 2013


Historia de la antigua grecia:


Zaragoza:

a ciudad de Zaragoza cuenta con más de dos mil años de historia. La población más antigua documentada data del siglo VII a. C., en los restos de unos poblamientos del final de la edad del Bronce. Sobre el asentamiento ibero de Salduie se fundó, entre el 25 y el 12 a. C., muy probablemente el 14 a. C.,1 una colonia inmune: Caesaraugusta, en honor de César Augusto. Tras una franca decadencia en los siglos III y IV después de Cristo, la ciudad siguió manteniendo con la dominación visigoda su influencia, siendo un destacado centro episcopal.
La llegada del islam produjo un nuevo periodo de esplendor materializado en la Taifa de Saraqusta, reino independiente que en la segunda mitad del siglo XI llevó la civilización andalusí a una de sus máximas cotas en filosofía y arquitectura.
Tras la conquista de la ciudad por Alfonso I el Batallador en 1118, se convertiría en la capital del Reino de Aragón, y fue también la sede en la que se coronaron los reyes de la Corona de Aragón. Sucesivas transformaciones en la baja Edad Media y la Edad Moderna tuvieron un desgraciado final en los Sitios de Zaragoza de 1808, con la práctica destrucción de la ciudad y la catástrofe demográfica subsiguiente.
Sin embargo, desde la segunda mitad del siglo XIX hasta nuestros días, Zaragoza ha seguido pujante, y es actualmente la quinta ciudad de España en términos demográficos.

lunes, 20 de mayo de 2013

Calagurris:

Los restos arqueológicos más antiguos encontrados en la zona de Calahorra, corresponden al Paleolítico Medio (periodo Musteriense), hace unos cincuenta mil años. Desde entones la presencia y actividad humana en la zona ha sido continua.
Calagurris Iulia, la actual Calahorra, era hace 2000 años, el núcleo urbano más importante del actual territorio de La Rioja y uno de los más importantes de la Hispania romana. Enclavado sobre los solares del actual casco antiguo calagurritano, contó con un impresionante desarrollo urbano del que aún quedan algunos restos arqueológicos: circo entre las calles Paletillas y Teatro, en el actual Paseo del Mercadal, termas entre las calles Eras, San Blas y Clínica, además de los conjuntos de las calles San Andrés y Cervantes, calzada que atraviesa el término municipal de Calahorra de sur a norte entrando a la ciudad por el actual camino junto al Santuario de Nuestra Señora del Carmen, donde al otro lado aún queda uno de los machones del antiguo puente, murallas en diversos puntos, restos del catastro romano, acueducto proveniente desde Sierra La Hez (Valle de Ocón), restos en el subsuelo de la red pública de alcantarillado (cloacas), además de mosaicos, esculturas, cerámicas y monedas que se pueden visitar en el Museo Municipal...
http://www.amigosdelahistoria.com/paseo%20romano.htm

miércoles, 15 de mayo de 2013


Complementos de lugar: unde y qua:


El acueducto de Segovia 3:

Está construido con sillares de granito colocados sin argamasa entre ellos. Sobre los tres arcos de mayor altura había en la época romana una cartela con letras de bronce donde constaba la fecha y el constructor. También en lo alto pueden verse dos nichos, uno a cada lado del acueducto. Se sabe que en uno de ellos estuvo la imagen de Hércules Egipcio, que según la leyenda, fue el fundador de la ciudad. Ahora pueden verse en esos dos nichos la imagen de la Virgen de la Fuencisla (patrona de la ciudad) y San Sebastián. El día 4 de diciembre, onomástica de Santa Bárbara, patrona del cuerpo de Artillería, cuya academia está en Segovia, los cadetes arropan la imagen de la virgen con una bandera. La línea de arcos se levanta organizada en dos pisos, con una decoración sencilla en la que predominan unas sencillas molduras, que enmarcan y estructuran el edificio.


Detalle de zonas restauradas del Acueducto de Segovia.
En tiempos de los Reyes Católicos se realizó la primera gran obra de reconstrucción del acueducto. Se encargó de las obras el prior del monasterio cercano de los Jerónimos del Parral, llamado don Pedro Mesa. Se reedificaron 36 arcos, con mucho respeto hacia la obra original. Más tarde, en el siglo XVI, fue cuando se pusieron en los nichos centrales las estatuas antes mencionadas de la Fuencisla y San Esteban.


Vista nocturna del acueducto.
El acueducto es el hito arquitectónico más importante de la ciudad. Se ha mantenido en activo a través de los siglos y quizás por eso haya llegado al tiempo presente en perfecto estado. Hasta casi nuestros días proveía de agua a la ciudad de Segovia, y más concretamente a su Alcázar. En los últimos años ha sufrido un patente deterioro debido principalmente a la contaminación medioambiental y a los propios procesos de erosión del granito. Las vibraciones originadas por el tráfico, contra lo que se pudiera pensar, no le afectan debido a su gran masa e inercia, hecho comprobado gracias a las recientes auscultaciones dinámicas efectuadas. Para garantizar su supervivencia, se ha procedido a un minucioso proceso de restauración que ha durado casi 8 años, bajo la dirección del arquitecto Francisco Jurado, al tiempo que se ha desviado el tráfico rodado de las inmediaciones del monumento (la plaza del Azoguejo se ha transformado en zona peatonal).
En 1992 los coches dejaron de pasar por debajo de los arcos del acueducto. Con todo, sigue expuesto a la contaminación ya que se sigue circulando a escasos metros de él.

El acueducto de Segovia 2 :


El acueducto de Segovia conduce las aguas del manantial de la Fuenfría, situado en la sierra cercana a 17 kilómetros de la ciudad, en un paraje denominado La Acebeda. Recorre más de 15 kilómetros antes de llegar a la ciudad. El agua se recoge primeramente en una cisterna conocida con el nombre de El Caserón, para ser conducida a continuación por un canal de sillares hasta una segunda torre (llamada Casa de Aguas), donde se decanta y desarena, para continuar su camino. Después recorre 813 m(con una pendiente de un 1%)2 hasta lo alto del Postigo (el espolón rocoso sobre el que se asentaba la ciudad en torno al Alcázar). Antes, en la plaza de Día Sanz, hace un brusco giro y se dirige hacia la plaza del Azoguejo, donde el monumento presenta todo su esplendor. En la parte más elevada mide 28 metros (con cerca de 6 metros de cimientos) y tiene dos órdenes de arcos que se sostienen con pilares. En total tiene 162 arcos. Desde su llegada a la ciudad hasta la plaza de Día Sanz hay 75 arcos sencillos y a continuación 44 arcadas de orden doble (esto es, 88 arcos), siguiendo después otros cuatro arcos sencillos. En el primer sector del acueducto aparecen 36 arcos apuntados, reconstruidos en el siglo XV para restaurar la parte destruida por los musulmanes en el año 1072. En el piso superior, los arcos tienen una luz de 5,10 metros, con los pilares de menor altura y grosor que los del piso inferior. El remate es un ático por donde discurre el canal conductor de agua (con una sección en forma de U de 180 x 150 cm), adaptándose el piso inferior a los desniveles del terreno. En el piso inferior, los arcos tienen una luz que oscila alrededor de los 4,50 metros y los pilares disminuyen su grosor de manera escalonada, de abajo arriba: en la coronación tiene una sección de 1,80 x 2,50 metros, mientras que en la base llegan a alcanzar 2,40 x 3 metros.

El acueducto de Segovia 1:

El Acueducto de Segovia es la obra de ingeniería civil romana más importante de España y es uno de los monumentos más significativos y mejor conservados de los que dejaron los romanos en la península Ibérica. Se trata probablemente del símbolo más importante para los habitantes de Segovia, hasta el punto de figurar en su escudo. La falta de inscripción, que estaba situada en el ático del acueducto, hace que no se pueda saber con certeza la época exacta en que fue construido. Los investigadores lo sitúan entre la segunda mitad del siglo I y principios del II, en tiempo de los emperadores Vespasiano o Nerva. No se conoce el origen de la ciudad. Sí se sabe que la zona estaba poblada por los vacceos antes de su conquista y que quizá hubiese asentamientos de tropas para su control y vigilancia. En cualquier caso, la zona perteneció al convento jurídico de Clunia.

lunes, 13 de mayo de 2013


Arco de constantino:

El Arco de Constantino (en italiano, Arco di Costantino) es un arco del triunfo que se encuentra entre el Coliseo y la colina del Palatino, en Roma. Se irguió para conmemorar la victoria de Constantino I el Grande en la batalla del Puente Milvio, el 28 de octubre de 312, y a otros emperadores anteriores. Dedicado en 315, es el más moderno de los arcos triunfales alzados en la Roma Antigua, de los que difiere por haberse construido gracias al expolio de edificios anteriores.
El arco mide 21 metros de alto, 25,7 m de ancho y 7,4 m de profundidad. Tiene tres arcos, siendo el central de 11,5 metros de alto y 6,5 de ancho, y los laterales de 7,4 de alto y 3,4 m de ancho cada uno. La parte inferior del monumento está construida con bloques de mármol, mientras que la parte superior (llamada ático) es de ladrillo con remates de mármol. A cierta altura desde el suelo, en el lado que mira al Palatino, hay una puerta a través de la cual se accede a una escalera formada en el grosor del arco.
El diseño general con una parte principal estructurada por columnas adosadas y un ático con la principal inscripción encima está realizado según el ejemplo del Arco de Septimio Severo en el Foro Romano. Se ha sugerido que la parte inferior del arco proviene directamente de un monumento anterior, probablemente de los tiempos del emperador Adriano

El arco cruza la Via Triumphalis, la ruta que tomaban los emperadores cuando entraban en la ciudad en triunfo. Este itinerario comenzaba en el Campo de Marte, pasaba por el Circo Máximo y alrededores de la colina Palatina; inmediatamente después el Arco de Constantino, la procesión giraría a la izquierda en la Meta Sudans y marcharía a lo largo de la Vía Sacra hacia el Foro romano y la colina Capitolina, pasando tanto por el Arco de Tito como por el de Septimio Severo.
Durante la Edad Media, el Arco de Constantino fue incorporado a una de las fortalezas familiares de la antigua Roma. Se restauró por vez primera en el siglo XVIII; las últimas excavaciones se han realizado a finales de los años 1990, justo antes del Gran Jubileo de 2000.

El arco de tito:

El Arco de Tito es un arco de triunfo, situado en la Vía Sacra, justo al sureste del Foro, en Roma. Fue construido poco después de la muerte del emperador Tito (nacido en el año 39 d.C., y emperador entre los años 79 y 81 d.C.).
El arco de Tito rememora las victorias de Tito contra los judíos. Las figuras que lo adornan se mueven entre lo real y lo divino, fundiéndose en una misma composición. En una de las escenas representadas aparece un personaje con yelmo (la diosa Roma); en otra escena aparece una “victoria”, que es un ser con alas que coloca la corona de laureles al emperador.
El arco se apoya en un podio sobre el que se encuentra el cuerpo formado por una bóveda de cañón asentada sobre dos pilares decorados con dos pares de columnas adosadas de capitel compuesto y ventanas ciegas en medio. Sobre el cuerpo se encuentra el ático, con una inscripción alusiva a Tito. A diferencia de otros arcos de triunfo como el Arco de Constantino, los relieves se concentran en las enjutas donde aparecen las Victorias que se dirigen a la clave, que destaca sobre el resto del arco. El entablamento está formado por un arquitrabe a tres bandas, un friso que representa el desfile triunfal de las legiones romanas en Jerusalén y una cornisa que soporta el ático. El intradós está decorado con casetones y a ambos lados hay representaciones de la entrada de Tito en Jerusalén, honrado por los soldados que llevan un candelabro de siete brazos.

miércoles, 8 de mayo de 2013


El coliseo romano:

El coliseo romano:

El Coliseo es un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo I ubicado en el centro de la ciudad de Roma. Originalmente era denominado Anfiteatro Flavio (Amphitheatrum Flavium), en honor a la Dinastía Flavia de emperadores que lo construyó, y pasó a ser llamado Colosseum por una gran estatua ubicada junto a él, el Coloso de Nerón, no conservada actualmente. Por su conservación e historia, el Coliseo es uno de los monumentos más famosos de la antigüedad clásica. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1980 por la Unesco y como una de Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno el 7 de julio de 2007.
En la antigüedad poseía un aforo para unos 50 000 espectadores, con ochenta filas de gradas. Los que estaban cerca de la arena eran el Emperador y los senadores, y a medida que se ascendía se situaban los estratos inferiores de la sociedad. En el Coliseo tenían lugar luchas de gladiadores y espectáculos públicos. Se construyó justo al Este del Foro Romano, y las obras empezaron entre el 70 d. C. y el 72 d. C., bajo mandato del emperador Vespasiano. El anfiteatro, que era el más grande jamás construido en el Imperio romano, se completó en el 80 d. C. por el emperador Tito, y fue modificado durante el reinado de Domiciano.4 Su inauguración duró 100 días, participando de ella todo el pueblo romano y muriendo en su celebración decenas de gladiadores y fieras que dieron su vida por el placer y el espectáculo del pueblo.4
El Coliseo se usó durante casi 500 años, celebrándose los últimos juegos de la historia en el siglo VI, bastante más tarde de la tradicional fecha de la caída del Imperio romano de Occidente en el 476 d. C. Así como las peleas de gladiadores, muchos otros espectáculos públicos tenían lugar aquí, como naumaquias, caza de animales, ejecuciones, recreaciones de famosas batallas, y obras de teatro basadas en la mitología clásica. El edificio dejó de ser usado para estos propósitos en la Alta Edad Media. Más tarde, fue reutilizado como refugio, fábrica, sede de una orden religiosa, fortaleza y cantera. De sus ruinas se extrajo abundante material para la construcción de otros edificios, hasta que fue convertido en santuario cristiano, en honor a los prisioneros martirizados durante los primeros años del Cristianismo. Esta medida contribuyó a detener su expolio y a procurar su conservación.
Aunque la estructura está seriamente dañada debido a los terremotos y los picapedreros, el Coliseo siempre ha sido visto como un icono de la Roma Imperial y es uno de los ejemplos mejor conservados de la arquitectura romana. Es una de las atracciones turísticas más populares de la moderna Roma y aún está muy ligado a la Iglesia Católica Romana, por lo que el Papa encabeza el viacrucis hasta el anfiteatro cada Viernes Santo.